Fotografió Jose Pivín-Diciembre 2008-
Cementerio argentino en Darwin-
Malvinas Argentinas ocupadas.
ANÓNIMO
Mi nombre figura en una de las 233 cruces.
Sin embargo estoy en Mount Pleasant.
Yazgo entre un montón de escombros
memoriosas plegarias
elevadas en Darwin como gaviotas ciegas.
Nunca luché
el hambre nos cercaba
como un acuerdo de torpes generales
una garra aferrada en las entrañas
y el frío
-esto quería contarte-
reclamaba el calor de tu cuerpo
como el mío una cruz para mis huesos.
Estoy en Mount Pleasant
código postal: la muerte
no lo olvides.
Julio Carabelli.
foto: Julio Carabelli
fuente texto y esta foto:
Facebook de Julio Carabelli.
Nota del Editor de este Blog:
A fines de diciembre de 2008 descendimos
mi esposa y yo del gigantesco Crucero
Norwegian Sun, que nos trajo de
Valparaíso rumbo a Montevideo y Buenos
Aires. El barco traía más de 2.900 turistas
y más de 900 tripulantes.
Allí, en la Isla que siempre hace frío,
alquilamos con otros amigos una
camioneta 4 x 4 con chofer británico,
que nos trasladó al Cementerio Argentino
en Darwin, un alejado paraje de Puerto
Argentino (Stanley).
Gran parte del camino no está asfaltado.
Pasamos frente a la Gran Base Militar
británica y vimos y sentimos a sus aviones
volar no muy alto...
El Cementerio en ese desolado paraje de
la Isla, es un monumento a los valientes
soldados argentinos que perdieron sus
vidas en esa desigual lucha.
Parte de sus Jefes los privó de buena
alimentación. No tuvieron adecuado
equipo termico ni armas modernas...
Incluso algunos oficiales argentinos
maltrataron y castigaron a sus subordinados,
estaqueándolos con el torso desnudo...
Verguenza de un Ejercito que había
tomado el poder de la República Argentina
unos años antes... constituyendose en
una Dictadura Militar.
Gran parte de las tumbas carecen de
los nombres de aquellos que allí
fueron enterrados....
En algunas hay más de un soldado
y en una o dos hasta 3 o 4 soldados.
"Aqui yace un soldado argentino cuyo
nombre solo DIOS conoce..."
El clima muy frío y un viento helado
que nos penetraba a los huesos, junto
a una helada llovizna nos recibió y
acompañó durante la visita a ese triste
lugar...
No me explico como los Gobiernos
Argentinos no han podido despues de
31 años trasladar todas las tumbas a
la Argentina, al Panteón Nacional de
dicha Guerra.
Lic. Jose Pivín
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