El pasado trepaba hasta mis ojos
desde la raíz del conflicto,
desde mi fuente-
Y de pronto un aroma a primavera
en flores que brotaban
de mis hombros.
Dulce madreselva
alrededor de mis piernas.
Margaritas en mis manos,
rayos de sol en el cabello.
Se mecía el viento en colibríes
que revivían la luz en sus colores.
Giraba el planeta
y yo con él me sumergía
en un universo verdadero.
desde la raíz del conflicto,
desde mi fuente-
Y de pronto un aroma a primavera
en flores que brotaban
de mis hombros.
Dulce madreselva
alrededor de mis piernas.
Margaritas en mis manos,
rayos de sol en el cabello.
Se mecía el viento en colibríes
que revivían la luz en sus colores.
Giraba el planeta
y yo con él me sumergía
en un universo verdadero.
Desilusiones
Desde que
dejaste tu marca en mi camino
ya nada fue
distinto.
Todo era
amor enloquecido.
Y también
era sabor a indiferencia…
Tu nombre
dejó en mi memoria.
El rastro de
un dios enternecido…
Y a
veces cuando creo que me amabas, siento pesada la nostalgia.
Cuántas
veces más habré de evocarte
Si mis
sueños de vos son sólo endebles cristales.
Abarco mil
mares de recuerdo
Y no llego
al precipicio final.
Viento y
sirenas juntos suenan
En agria
sinfonía de delirios.
Ya aparecen
los disfraces del silencio,
Esperando
para atraparme…
No hay un
punto crucial en este enfoque,
Que me
obligue a satisfacerme en una idea…
Todo parece
haberse adormecido,
Desde que
partiste tras el anhelo de otro cuerpo.
Y me
pregunto por qué, si no aparece el sol en tu voz anochecida,
Es que yo
escucho en tu garganta ese amor que no quieres darme.
Pero aunque
camine nuevamente los senderos
De mi
existencia,
Recobro la
conciencia
De la vida a
tu lado…
De la vida
que a tu lado fue…
Quiero
recordarte en un ensueño
Pero apenas
si logro abrigar en mi alma afligida
Aquello que
el tiempo criticó
Haciendo que
la destrucción fuera la mayor victoria…
No quiero
prometerte aunque pudiera
El sabor de
mil noches candentes
A lo mejor
sólo pueda hoy darte lo que tus ojos ya conocen de los míos:
La franqueza
de un instante de pasión descontrolada…
No quiero
creer que fugazmente pasaste…
Con la
ligereza de las olas al final de la marea.
Sino mas
bien que fuiste fragmento de aquel sin-destino
Que supimos
escribir.
Qué locura
esta tarde en que no recobro
Ni tu imagen
ni tu sombra.
Tu aliento
dejó de abastecerme de lo que ansío desde que soy gaviota…
Voy a dar
conclusión al espanto.
Voy a
entregar el alma marchita.
Ya no corro
más tras un tiempo muerto
Que pasa por
dentro solamente.
Hoy entrego
en la carrera de mi vida
La medalla
que no logré conseguir.
Parece que
los ideales eran ficticios.
Y hasta me
hicieron trampa en su devenir…
A quién
protesto por mis desengaños…?
Si acaso los
otros están más desengañados que yo…
O tan
enloquecidos como yo…
Esperando en
vano que aún llegue esa otra oportunidad de amar.
Soltar,
dejar ir,
fluir con el viento
desde las cuerdas
de un violín.
Soltar,
dejar que sea,
que la marea vaya
de nuevo a la profundidad
de un piano.
Dejar que el tiempo
y el espacio
sean una cuestión
personal.
Y que entre tantos
universos seas,
un pequeño átomo
decidido a crear
un mundo nuevo.
dejar ir,
fluir con el viento
desde las cuerdas
de un violín.
Soltar,
dejar que sea,
que la marea vaya
de nuevo a la profundidad
de un piano.
Dejar que el tiempo
y el espacio
sean una cuestión
personal.
Y que entre tantos
universos seas,
un pequeño átomo
decidido a crear
un mundo nuevo.
Margaritas
mezcladas con viento,
esperando la sal en la bruma
que llega de lejos.
Movimiento alegre
en la intimidad de la costa.
Llevan las olas
la semillas de arena
que contienen el germen
del universo.
Fuente: FACEBOOK.
esperando la sal en la bruma
que llega de lejos.
Movimiento alegre
en la intimidad de la costa.
Llevan las olas
la semillas de arena
que contienen el germen
del universo.
Fuente: FACEBOOK.
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