Antonio Porpetta descubre su placa (Jesús Cruces)
El poeta eldense Antonio Porpetta
acudió ayer a las
instalaciones del
antiguo colegio El Seráfico donde
este curso se instala la
Escuela de
Adultos que lleva su nombre para
descubrir la placa que así lo
acredita.
Los alumnos comienzan las clases
el próximo lunes y el Premio de las
Letras de la Generalitat Valenciana,
les dedicó unas palabras durante el
acto
de ayer.
fuente:
http://www.diarioinformacion.com/elda/2013/09/20/porpetta-descubre-placa/1417164.html
(2011)
INTENTO DE POÉTICA
Escrito y publicado hace ya tiempo, este texto
recoge mis ideas sobre la poesía, el poeta, el
acto poético y el poema. Para mí sigue
plenamente vigente, y por eso he querido
compartirlo con los posibles visitantes de
este blog.
I.- Si ya está definida, ¿para qué intentarlo de
nuevo?
Poesía es, según el poeta Leopoldo de Luis,
“respirar por la herida” . Pero, por suerte y
por desgracia, nuestra herida no cicatriza
nunca.
Y por eso podemos seguir respirando.
II.- Poesía, juego peligroso: el poeta, al
enfrentarse con su propia desnudez, puede
encontrarse con naufragios interiores que
nunca conoció antes. Pero, a pesar de ello,
hay que arriesgarse.
III.- La poesía es lo único que hace
plenamente libre al poeta. Con ella, rompe la
soledad que le encadena y consigue una
intensa y profunda comunicación con nadie.
IV.- La poesía es un círculo cerrado: parte de
lo intuitivo, pasa por lo intelectual, y vuelve
otra vez a lo intuitivo por el camino de la
emoción. En medio de ese círculo, el poeta,
con su carga de asombro y desconcierto.
V.- Si te preguntan: ¿por qué escribes
poesía?, no contestes. Calla y sigue tu camino.
Que busquen la respuesta en tus poemas.
Sólo ellos pueden dar la medida exacta de tu
iluminación.
VI.- Ser poeta no es llevar un marchamo de
élite.
Ser poeta es ser un hombre consciente de su
humana condición; y asumirla con la
humildad del dolor compartido. Ni mejor ni
peor que los demás hombres,pero sí distinto:
más frágil y más fuerte al mismo tiempo.
Por mandato biológico, quizás.
VII.- No nos confundamos: una cosa es tener
sensibilidad, espíritu poético, capacidad
emocional… y otra ser poeta. Porque el poeta,
además de tener todo eso y sentirlo como
afirmación existencial, escribe versos.
No hay poeta sin poema, igual que no hay
poesía sin poeta que la invente o la descubra.
VIII.- No ser poeta sólo ante la cuartilla blanca.
Siempre, en cada momento del día o de la
noche, ante cualquier circunstancia. Pero sin
cometer la ingenuidad de demostrarlo. Que
nadie descubra vuestro estigma si no es
estrictamente necesario.
IX.- La vanidad en el poeta no es
recomendable, aunque sí comprensible.
Porque el poeta se sabe inmortal. Aunque a
veces olvide que su inmortalidad dura
escasísimos segundos.
X.- La soledad física es casi necesaria para el
acto poético. Sin ella es muy difícil que se
produzca el milagro en toda su intensidad.
La soledad espiritual se presupone: no hay
poeta que no la lleve consigo, por muy
acompañado que parezca.
XI.- En el centro del poema, siempre, el hombre.
No hay auténtica poesía si en ella no campea
el humano acento, tanto más profundo cuanto
más solidario.
XII.- En cada poema, un grito, un asombro, una
llamada. Otra cosa serán fuegos artificiales,
quizás hermosos pero perecederos: sólo un
rastro de pólvora en el cielo.
XIII.- No se puede hablar de oro falso.
Tampoco de poesía sin emoción. Porque la
emoción es el hilo sutilísimo que une al poeta
con el lector.
Si no existe, no hay comunicación posible.
Y el poema se queda en una pobre lluvia que
nunca moja a nadie.
XIV.- Acto poético, acto mágico: las voces
dispersas se mezclan en la redoma del poeta
con su propia sangre. Y surge el poema, a
veces con la sorpresa de lo inesperado o lo
desconocido. El rito puede ser lento y doloroso.
Pero hay que confiar en lo intangible, que para
eso escogimos el camino.
XV.- Amor a la palabra. Respeto a la palabra.
Agradecimiento a la palabra. Porque sin ella no
seríamos. Sólo en ella renacemos cada día
libres, indemnes, puros.
XVI.- Junto a la palabra, definidora o
sugerente,el silencio. Muchas veces, un
no-decir a tiempo clarifica más el poema,
contribuye a su exacta luminosidad. Que
también el silencio encierra sus clamores.
XVII.- Ni transparencia ni hermetismo. Quizás
el justo medio. Pero que cada cual interprete
libremente qué es la luz y qué es la oscuridad.
Ahí está el poema: completadlo con vuestra
recreación.
XVIII.- No nos engañemos: todo está dicho.
Pero hay que seguir diciéndolo de forma distinta.
Porque la poesía es un río que nunca
encontrará su mar, aunque lo busque
implacablemente.
Ahí está la razón de su hermosa supervivencia.
Y la gloria y la miseria del poeta.
XIX.- Cualquier anécdota es útil, hasta la más
íntima o más doméstica. Pero siempre que
pueda traducirse en una experiencia universal.
XX.- La inspiración, eso que la gente llama
inspiración -una especie de chispazo de luz
interior-sirve, a lo sumo, para un verso, para
una idea, para una imagen o una metáfora.
Casi nunca para un poema completo.
El poema se fragua trabajando, a golpe de
cincel, dejando en las cuartillas las esquirlas
de la propia vida.
Aunque sin magia de nada sirve la artesanía.
XXI.- Conviene cultivar los símbolos propios,
los personales e intransferibles. Pero también
olvidarlos en el momento de escribir. Que no
hay cosa más triste que un poeta plagiándose
a sí mismo.
XXII.- Todo puede ser válido, desde la simple
astilla al árbol más frondoso; desde el pájaro
enjaulado hasta aquel que vuela a su libre
albedrío. Pero sin olvidar que en poesía fondo
y forma, continente y contenido, constituyen
una unidad inseparable, sin posibilidad de
distinción alguna.
XXIII.- Hay que caminar por la vida siempre
alerta, sin permitirse el más leve descuido.
Porque jamás se sabe dónde habita la mínima
semilla del milagro.
XXIV.- Las ventanas abiertas, siempre abiertas.
Participando de la vida desde la amorosa
contemplación, incorporándola a nuestro ser,
compartiendo su fuego y su ceniza. Si hay
que acudir a la autobiografía, que sea desde el
alféizar, nunca desde un lejano rincón.
XXV.- Y a veces llega la duda, con su triste
escarcha de desaliento: Y todo esto ¿para
qué?… Pero sabemos que cada noche
encierra su mañana, y hay que seguir
buscando esa mañana. A pesar de esa duda,
a pesar de esa noche, a pesar de esa escarcha.
http://www.porpettablog.com/p/intento-de-poetica_12.html
NOTA DEL EDITOR DE ESTE BLOG:
Antonio Porpetta es además de un notable y talentoso
poeta y escritor, una bella persona. De esas que uno
quisiera de amigo, tener de vecino.
Lo conocí personalmente en Noviembre de 1994, en una
reunión literaria en el Palacio de las Americas(si mal no
recuerdo el nombre del lugar) gracias a la presentación
que nos hiciera un querido amigo en común, Manuel
Quiroga Clerigo, tambien poeta y escritor.
Desde ese momento soy uno de sus más grandes
admiradores y lo considero mi amigo.
Estoy convencido que Antonio Porpetta es uno de los
más grandes poetas españoles de todos los tiempos.
Con seguridad, de lás últimas siete decadas....
Y creo además, que debería ser postulado como firme
candidato al Premio Nobel de Literatura.
Recomiendo calurosamente visitar su hermoso Blog:
http://www.porpettablog.com/p/intento-de-poetica_12.html
No se arrepentirán
Felicitaciones querido Antonio por el nuevo honor que te
han conferido en vida, el que tu nombre sea desde ahora
el de la Escuela de Adultos en Elda.
Es una buena costumbre la que tienen en tu hermoso
País de nombrar plazas, escuelas, etc, con nombres de
personas que se lo merecen,EN VIDA.
Te deseo a tí y a tu inseparable esposa Luzmaría Jimenez
Faro larga , fructifera y saludable vida en la bella España.
JOSE PIVIN
frente al puerto de Haifa
frente al mar Mediterráneo
el mismo mar que nos une....
PLACA INAUGURADA EL 30 DE ENERO DE 2010
PLACA INAUGURADA EL 23 DE JUNIO 2011
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