martes, 4 de septiembre de 2007

Exposición de Francisca Blázquez en Museo Casa de la Moneda.




Exhibe 16 obras pictóricas dentro del concepto del Dimensionalismo en el Museo Casa de la Moneda, en el marco del VIII Congreso Nacional del Color del 11 al 21 de septiembre de 2007.



Francisca Blázquez, la vanguardia dimensional de la geometría espacial



Francisca Blázquez expone del 11 al 21 de septiembre en Museo Casa de la Moneda, dentro del marco del VIII Congreso Nacional del Color, organizado por la Sociedad Española de Óptica, que tendrá lugar del 19 al 21 de septiembre de 2007. Presenta 16 obras realizadas en 2007, caracterizadas por el prisma cromático que exhiben, en el que predominan violetas, azules, negros, amarillos, verdes, blancos, anaranjados, morados y rojos.
La obra pictórica de Francisca Blázquez se enmarca dentro de la vanguardia dimensional de la geometría espacial. Trata de estructuras de diferente signo, conformadas por geometrías complejas, de numerosos ángulos, otras poliédricas, multipoliédricas, hexágonos, heptágonos, octógonos, dodecaedros, todos ellos situados
dentro de una dinámica sutil, emplazados en el espacio, flotando, sin ataduras terrenales. Se trata de formas que se mueven en un contexto espacial, que puede ser cósmico, pero también inventado, imaginado, transmitido, inspirado en aquellas dimensiones que existen pero no se ven. De ahí que, aunque sus formas vanguardistas sean concretas, adscritas dentro de la geometría espacial, lo que realmente significan es la simbología que representa la evidencia iconográfica espiritual.
En ocasiones representan seres angelicales, en otras son reflejo de evidencias fluidas, místicas o bien también materiales.
Las formas, formas son, pero su significado, colores e intención van hacia el asentamiento de un discurso emblemático, en el que lo fundamental es la enfatización de la trascendencia.
Nos muestra lo inconmensurable, la verdadera dimensión de un universo insondable, en el que no hay límites ni los propios del mismo.
No existe la materia, solo evidencia, es decir que la estructura de la misma es vibración, representada por su dominio del color, en un contexto donde el color vuelve a ser protagonista, formando parte de espacios y cielos, que no lo son, porque son estadios dimensionales.
Las limitaciones convencionales desaparecen, van más allá de sus alcances, se vehiculan a partir de una actitud sutil, evidente, ejemplar y clara para mostrar con determinación la verdadera proyección de sus ideas.
Sus ángeles y arcángeles surgen de una posición creativa de la artista, nacida en la capital de España, que va más allá de la biología. Resalta, sobre todo, la importancia que tiene su poder mágico espiritual, dotándolos de colores de tonos transparentes y sensibles, concentrados en una pléyade de líneas que se orientan en la diversidad de la fantasía pura contenida en la configuración.
Sus otras creaciones, entendidas en toda su extensión física, se encuadran dentro de la línea de la vanguardia dimensional formal, entendida por estar constituida por elementos estructurales nunca vistos, paradigmáticos, en los que predomina, a pesar de su solidez, una extraña y agradable sensación de calidez.
Sus formas son etéreas, bien construidas, pero de una elegancia sutil, absolutamente esenciales, en el aspecto de configurar un mundo ideal, poblado de componentes, elementos y seres positivos, sin malicia, transparentes, sin doblez, al margen del dualismo, sin tener constancia del ego, alejados de cualquier predisposició n material, porque son consecuencia de la mente sabia.



Joan Lluís Montané
De la Asociación Internacional de Críticos de Arte

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